lunes, 13 de abril de 2015

Especial Ártese quien pueda ediciones: ÁNGELA SEGOVIA

Si hablo es porque tengo algo que se rompe


EL OFICIO

el palacio de la cultura es una cárcel blanca
cúmulo de fuegos del 20 entre chatarras del todo armónicas
muros desollados que a nadie duelen
cuatro y veinticinco siempre
bajo la escalera, focos quemados, incluso la espiral
deja de ser eterna
así, lentes difusas y las astas del renacido ciervo
otra vez
fueron cortadas de raíz hasta yacer inútiles
en la casa de Méliknov, Moscú
lienzos tendidos, una colmena esectacular.

(de paso a la ya tan, Ártese quien pueda)

TRAYECTORIA

a veces un hombre semidesudo camina por una plaza y canta, se desvía unos pasos y golpea a otro hombre con el puño cerrado y lo increpa, y el otro hombre sonríe y por le que parece le habría gustado hacer una foto de ese momento. luego cada uno a su camino, atrás los gritos, atrás los cuartos, convulsivo hombre realmente furioso y semidesnudo y furioso, se aleja por una plaza y canta.
cortina de pájaros
(de paso a la ya tan, Ártese quien pueda)



martes, 7 de abril de 2015

Especial Ártese quien pueda ediciones: MIGUEL CASASOLA

Sé de dónde procedo, pero no sé adónde pertenezco




ROMANCE LITERARIO
                                             Para...

Nuestro romance
fue como leer un libro
cuando dispones de poco tiempo.
Trabajábamos juntos,
vivíamos separados.
Nos besábamos en el metro.


CUANDO EL TIEMPO MUERE
                                  A Leopoldo María Panero

Cuando el tiempo muere
la vida se suspende
como en un baúl enterrado,
todo está sin estar
y las manos y las puertas
son una quimera.

Y lo peor es que el tiempo
es más humano
de lo que pensamos:
tiene criterio.
Cuando el tiempo muere,
muere sin pedir permiso. 

(Miguel Ángel Casasola, Esquinas y rincones. Ártese quien pueda)


domingo, 5 de abril de 2015

Especial Ártese quien pueda ediciones: ANDREA AGUIRRE

El ciclo lunar de los parétesis nos cautiva con una voz propia de mujer capaz de renacer tras el llanto.


Toma
mi corazón con tus manos
                                         apriétalo
                                         estrújalo
                                         tíralo
                                         rásgalo
                                         rómpelo
                                         muérdelo
                                         písalo
                                         aráñalo
                         incluso dinamítalo
está tan lleno
que no podrás desangrarlo.
(ANDREA AGUIRRE, El ciclo lunar de los paréntesis. Ártese quien pueda ediciones)



Día 2.190

El misterio de la muerte es muy redondo, como un agujero de cañón. Nada hay más subversivo que un reloj de sol debajo de las alas de tu casa.

Sin embargo, ocurren las agendas. Los horarios, calendarios cuadriláteros.

Prefiero echarme la siesta en el sofá.

(Has escrito tu historia en una página y te sobran líneas. Es porque hay toda una vida en una sola letra)

(ANDREA AGUIRRE, La infancia suicida de Verónica Qué. Ártese quien pueda ediciones)

jueves, 2 de abril de 2015

NANA DE LAS ESPINAS de Francisca Aguirre



NANA DE LAS ESPINAS
                                                A Luz Pichel
Hay que ver lo tristísimas que están siempre las espinas.
Y no hay manera de alegrarlas:
aunque les cantes y les cantes
siempre lloran, no paran de llorar.
Debe ser porque pinchan.
Lo de pinchar no gusta a nadie.
Tienen clara conciencia de que ya no sirven,
de que son desperdicios miserables;
por eso yo les canto la nana de los acericos:
"Si quieres ser feliz
aun siendo espina
búscate el acerico del consuelo"
Nunca falla, se ponen tan contentas las espinas,
ríen igual las de las rosas
que las estilizadas de los congrios.
Ya se sabe: la alegría nos convierte en demócratas a todos.
(Nanas para dormir desperdicios, Hiperión)